El 41% considera que una economía en recesión con inflación al alza será la mayor complejidad que enfrentará el país en 2023.
El incremento a la tasa de interés y al costo de los insumos son los principales temores que consideran los altos directivos en México. Ricardo Delfín, socio de clientes y mercado para KPMG México y Centroamérica, refiere que desde el año pasado encontraron señales respecto a la importancia de mantener la resiliencia ante los cambios que sufre el planeta en cuestiones económicos y políticos. Señaló que este año pasamos de una etapa de ser reactivos ante los momentos complejos, a una etapa de edificación y adaptación continua de una manera proactiva.
Los consultores evalúan que este año la alta dirección mostrará cautela en las decisiones tomadas, ante la expectativa económica que cruza el mundo en general. “El 66% de los encuestados muestran temores ante una posible recesión, asímismo el vivir en un ambiente inflacionario ha formado parte de las discusiones, donde añaden que el 2023 se caracterizará por una inflación al alza”.
Sin embargo, el estudio “Alta Dirección en México 2023” anticipó que podría existir una confianza en cuestión financiera para las compañías a mediano plazo, pero muestran cautela en las expectativas de la macro y geoeconomía.
“Una parte importante considera que las ventas del 2023 pareciera que serán superiores a las del año pasado, el 37% considera que dicho incremento podría ser más del 6%, lo cual, puede mostrar que si bien es cierto el temor por una posible recesión, los encuestados no esperan que sea larga, o que puedan aprovechar las oportunidades que estará brindando el nearshoring y el crecimiento que puede tener el vecino del norte; refuerza la importancia de mantener una mentalidad de crecimiento por parte de las empresas e industrias”, añadió Delfín.
FACTORES DE COMPLEJIDAD
No sólo la inflación, sino otros eventos cómo las variables a los precios de los combustibles y materias primas juegan un factor en la complejidad de decisiones de inversión. “Se debe aprender a coexistir con eventos disruptivos, con esto no nos extraña que la alta dirección considera que los principales retos en el país es que se logren las condiciones adecuadas para un desarrollo económico”
Razón por la que las preocupaciones de los altos mandos en los corporativos nacionales es la inflación, por los costos de inversión en insumos para la producción de las diversas industrias. Recomiendan que es momento de revisar los procesos que puedan ejecutarse de manera más eficiente e identificar áreas de oportunidad y aprovechar sobre todo la transformación digital.
SEÑALES DE LAS CONDICIONES 2023
Existen cuatro mensajes claros para lo que sucederá en el año: el primero de ellos es la importancia de asimilar lo aprendido en la pandemia en cuestión de adaptación de modelos de negocios; el segundo indica que los directivos deben mantener una cultura organizacional para enfrentar la disrupción constante.
El tercero es la innovación, donde la transformación digital es un elemento primordial en las organizaciones, donde dejó de ser un tema de supervivencia a formar parte de los modelos de negocios; el último mensaje es la identificación de riesgos emergentes. Por lo anterior KPMG señala que la esencia que recomiendan y que lo demuestran en su estudio es “capitalizar la experiencia, para lograr el crecimiento”.
2022 FUE CLAVE
El año pasado se caracterizó por la incertidumbre, pues mostró mensajes de optimismo con un rebote en la economía posterior a la crisis sanitaria, pero se experimentaron una serie de eventos geopolíticos catastróficos y retadores. Señal que los consultores mencionan “pone en manifiesto la importancia de aprender a vivir en un mundo disruptivo y cambiante” y la adaptabilidad que deben tener los negocios ante las situaciones impredecibles.
Gerardo Rojas, socio líder de asesoría, apunta que para hablar de innovación se debe de mirar hacia una cultura organizacional involucrada con la tecnología y que se adapte a los cambios, por lo que en uno de los hallazgos se menciona que el 25% de los altos directivos consideran que en su organización se tiene un ADN innovador.
“Apenas hay un 25% en México que considera que esto ha permeado a lo más profundo de sus empresas, sin embargo, se muestra que la mayoría (66%) cuestiona las estrategias para enfocarse en que innovar para este año; pues el 53 por ciento de los encuestados menciona que se enfocarán en mantener la permanencia del negocio y al mismo nivel incrementar la productividad y ventas”.
Gerardo reflexiona que la permanencia del negocio puede llevar a concluir que la mayoría de la alta dirección considera que ha generado una cultura de innovación de una manera reactiva de sobrevivencia en el mercado.
Los asesores de la firma apuntan que para acelerar una transformación digital es necesario facilitar una cultura de innovación, es importante manejar los elementos internos cómo el liderazgo de la compañía; capital humano, que jugará un papel importante en el desarrollo de una cultura; y fomentar los intereses de la plantilla.
Será esencial la adaptación de la tecnología para la permanencia en el mercado ante la coyuntura económica que enfrenta México, principalmente herramientas que facilitaran el ecosistema competitivo como las herramientas de análisis de datos, el internet de las cosas, inteligencia artificial, y automatización en los procesos burocráticos y de producción.