¿Quién compró boletos para este circo?
Las últimas semanas han sido un completo circo, uno muy cutre, en el que en la pista principal actúan los integrantes del poder legislativo pertenecientes al mismo grupo político del presidente de la República, saltándose nuestra Constitución, malabareando con la división de poderes, tapándose los oídos mientras gritan para evitar el diálogo y corriendo por todos lados para huir de su obligación con quiénes los votaron.
Actuando como si el cargo les perteneciera y les diera libertad para hacer y deshacer con él lo que se les antoje o les ordenen desde palacio nacional, se han postrado a las órdenes y al servicio de los intereses de una sola persona.
Y si esto no fuera lo suficientemente grave, una vez que el poder judicial con independencia y apego al estado de derecho les corrige la plana, se lanzan con un discurso incendiario, vacío, sin argumentos y sin respaldo legal. Un verdadero circo, trágico y preocupante para todos los ciudadanos.
Independientemente de nuestra línea política de pensamiento, a nadie le conviene un modelo de gobierno autoritario, absoluto, sin respeto por el estado de derecho, irreflexivo, al que le “estorban” las instituciones que arbitran, que lo regulan, que lo cuestionan, que lo transparentan, que le exigen.
Lamentablemente todos compramos los boletos de este circo. Si hoy estos diputados y senadores se sienten dueños del cargo y piensan que pueden hacer con él lo que quieran y les convenga, es porque nosotros lo hemos permitido, hemos dejado que pasara, se nos olvidó que este país es de todos, de las mayorías y de las minorías. Y que, aunque sea difícil, estamos obligados a dialogar y a llegar a acuerdos entre todos.
En México votamos pocos, y los pocos que votamos pensamos que al salir de la casilla termina nuestra responsabilidad como ciudadanos, pues no, TODOS debemos ejercer nuestro derecho a elegir y votar pero, además, es igual de importante vigilar que los elegidos por nuestro voto cumplan con su deber, que respeten la ley, que mantengan su compromiso con nosotros y no se sometan ante otros intereses. Respetamos que tengan una corriente política, pero ésta no puede estar por encima de la ley, ni de la división de poderes.
Hoy la Suprema Corte de Justicia de la Nación estuvo a la altura, con independencia y valor actuó en defensa del orden constitucional, cumplió con su deber y nos dio esperanza a los ciudadanos. Pero, no puede estar bajo ataque permanentemente, no podemos permitir que la fracturen, no está sola, debemos apoyarla y protegerla, así como al INE, así como al INAI o al CONACYT, por citar algunas instituciones.
El Plan C debería ser nuestro, de los Ciudadanos, compremos un boleto por México, por nuestras libertades, por nuestros derechos y las instituciones que los garantizan, sin importar que gobierne o no, la mayoría con la que más nos identifiquemos.
Hoy más que nunca, necesitamos ciudadanos comprometidos, dispuestos a interesarse y a alzar la voz por lo público.
En el Modelo de Desarrollo Inclusivo (MDI) que impulsamos desde la COPARMEX como nuestra hoja de ruta hacia un futuro con oportunidades para todos, proponemos la promoción de un Sistema Político Democrático y de Derecho, con instituciones independientes, con leyes y reglas claras, estables y cumplibles, desde él exigimos respeto a la división de poderes, equilibrio entre gobierno y sociedad y la participación de los ciudadanos en las políticas y decisiones públicas, como un componente central en la construcción de nuestro país.
Como sector empresarial trabajamos por el bien común, preocupándonos no solo por nuestras empresas, sino por cada persona que forma parte de ellas, impulsemos desde la sociedad, un Estado de Derecho que garantice el respeto a los derechos de todas las personas a través de instituciones sólidas que promuevan, desde la autoridad y con la ciudadanía, los valores que sostienen a nuestra democracia.
¡Hasta la próxima y que Dios reparta suerte!