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El avance tecnológico brindó un cambio en la forma en la que vivimos y realizamos nuestras actividades, beneficiándonos en muchos aspectos, sin embargo, la basura electrónica va al alza. El aumento de aquellos junto con el manejo inadecuado crea riesgos, no sólo para el medio ambiente sino también para el ser humano.

En la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) junto con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) expuso que en el segundo semestre de 2023 hubo 93.1 millones de cibernautas, es decir, 78.6% de la población con 6 años o más, asimismo registró 93.8 millones de usuarios de celular, un 79.2% de la población.

 

Los habitantes de 6 años o más representaron el 37% de uso de computadora, una disminución de 5.4% en comparación con 2019. En tanto, los hogares que cuentan con al menos un televisor es de 34.1 millones, así pues, 90.7% del total tiene uno.

 

DESECHOS Y DAÑOS

De acuerdo con una publicación del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) al año se contabilizaron alrededor de 50 millones de toneladas de desperdicios tecnológicos. En América Latina y el Caribe en 2022 aumentó, junto con la media mundial, un 49% frente a los últimos diez años, mientras que la recolección en estas regiones fue de 2.7% en una tasa global de 17.4 por ciento.

 

En 2010 cada mexicano produjo entre 3 y 5 kilogramos de basura electrónica, en 2023 entre 7 y 9 kilogramos, multiplicado por los 120 millones residentes se estaría entre 80 mil y 840 mil toneladas, sólo en 2021 se superaron los 1.2 millones de toneladas métricas por lo que el país se posicionó como el tercer lugar de toda Latinoamérica y el Caribe según la información del Sistema de Aguas de Huixquilucan (SAH).

 

Con base en cifras de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO) durante 2020-2021 el teletrabajo y la educación a distancia aumentó hasta un 75% el consumo de televisores, computadoras y celulares. En territorio mexicano, el aumentó de varias toneladas se observó, y el 6% contienen materiales altamente contaminantes. Las entidades que más producen son Ciudad de México 117 mil, Jalisco 82 mil y Baja California 58 mil toneladas.

 

El Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad (IIES) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) señaló los riesgos que causan los desechos para el ambiente, estos representan un peligro para organismos y ecosistemas, además de la salud humana como problemas respiratorios, cáncer y problemas reproductivos, puesto que el material con los que son construidos puede contener metales como el plomo, el mercurio y el cadmio, entre otras sustancias tóxicas.

 

El insuficiente reciclaje de estos hace que lleguen a tiraderos clandestinos, lo cual da paso a la producción de lixiviados; líquidos derivados del proceso de descomposición orgánica y la mezclan con otras sustancias como los metales pesados de aparatos tecnológicos, estos son absorbidos por el suelo, y al paso de años podría desembocar en la contaminación de suelo, agua y aire de manera irreversiblemente.

 

Las buenas prácticas de reciclaje o reutilización además de reducir los impactos en la salud y ambientales pueden favorecer a la recuperación de materiales entre metales preciosos y plásticos, que bastaran para fabricar otros nuevos productos. Mientras que la reutilización ayuda a extender la vida útil de los dispositivos y así reducir la cantidad de estos.

 

ECONOMÍA CIRCULAR

En el 2019 en Latinoamérica la gestión de los residuos electrónicos representó una oportunidad económica, debido a que se encontró en estos 7 toneladas (t) de oro, 0.31 t de tierras raras, 591 kilates (kt) de hierro, 54 kt de cobre y 91 kt de aluminio, dando un valor cercano a mil 700 millones de dólares de materias primas secundarias: datos correspondientes del estudio Monitoreo regional de los residuos electrónicos de Sustainable Cycles Programme United Nations University (UNU-VIE SCYCLE por sus siglas en inglés) y United Nations Institute for Training and Research (UNITAR por sus siglas en inglés).

 

El 65% de los materiales que componen los dispositivos electrónicos son metales tales como el oro, plata, paladio y plásticos reciclables, se pueden extraer para un beneficio económico. Si se usaran estos elementos podrían ahorrarse hasta 57 mil millones de dólares, en tierras mexicanas podría ser aproximadamente de mil 300 millones de dólares, señalo PNUMA.

 

El reciclaje y reutilización de los dispositivos tecnológicos tienen una vida útil recomendada, sin embargo, la obsolescencia también puede representar una oportunidad de ganancias para otras áreas e industrias que reúsen las materias primas contenidas. Del mismo, modo la población puede contribuir a que estos sean eliminados de la forma más ecológica posible al ser entregados en centros de reciclaje, así la protección del medio ambiente con la involucración de todos ayudará a reducir los impactos.