Se trata de 28 instituciones financieras, 1 Institución de Banca de Desarrollo, 2 Sociedades Anónimas de Capital Variable, 1 Unión de Crédito y 1 Sociedad Financiera de Crédito Popular Nacional, debidamente constituidas e inscritas en el SIPRES de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
En el caso de la tlaxcalteca SPH Servicios Financieros, es una sociedad anónima de capital variable que opera como sociedad financiera de objeto múltiple dedicada a créditos, siendo una entidad no regulada.
SPH Servicios Financieros se ubica en Avenida Miguel de Lardizabal y Uribe 13, Colonia Tlaxcala Centro, en Tlaxcala con teléfono (246) 246 328 9294, mail administracion@sphfinanciera.com
En cuanto a quien robó la identidad para defraudar a posibles clientes, los datos usados por los suplantadores -conforme el reporte de la Condusef-, son “EVEREST, S.A. (ASEGURADORA)”, Josué Ávila Romero, Asesor. Kathia, Finanzas. Francisco Salas Garcia, Finanzas. Mireya López, Jurídico, con teléfonos 246 177 4229, 246 177 4461, 246 177 4913, 246 177 9776, 246 177 4086, 246 173 0747, 246 173 1180 y 246 174 9776.
Los mismos montaron una página y correo electrónico:
https://sphfinanciera.com.mx
asesoria@sphfinanciera.com.mx
Asimismo, pedían depósitos de dinero para tramitar créditos en la cuenta para depósito BANCOMER: 1576 5039 98. CLABE: 012180015765039989, o a través de Tienda de conveniencia en la tarjeta 4152 3141 2626 8286.
En el caso del Banco del Bienestar la suplantación se dio a través de una cuenta de Facebook: https://www.faacebook.com/people/Johana-Morales/pfbidTva9vJ1FxFZS1VSumd72AsU6M6baRjEFYE2k3ATGde7WAmWn3ueXEEMFzYJJietRl/, en una cuenta a nombre de Johana Morales.
Además, en agosto fueron suplantadas entidades financieras de Ciudad de México, Guanajuato, Quintana Roo, Baja California, Jalisco, Estado de México, Sinaloa, Oaxaca, Nuevo León, Coahuila, Sonora y Tlaxcala.
La suplantación de su identidad se lleva a cabo por personas físicas o “empresas”, que buscan afectar económicamente o engañar a quienes requieren de un crédito (servicios financieros), utilizando indebidamente su nombre y/o logo y/o denominación a través de medios de comunicación (impresos o digitales).