Offshoring y su impacto en la economía
Mundo Ejecutivo 28 noviembre, 2022EMPRESAS CON ALTOS VOLÚMENES DE MANUFACTURA Y DE SERVICIOS CON ALTO CONTENIDO TECNOLÓGICO TIENDEN A ESTE MODELO
El actual proceso de globalización económica se ha desarrollado de manera más acelerada en los lugares que se garantiza la rentabilidad del capital y no se entiende sin la apertura comercial, las innovaciones tecnológicas y sobre todo sin la liberalización de las regulaciones nacionales sobre inversión extranjera que se ha hecho en los últimos años, al menos desde el consenso de Washington.
Siguiendo la afirmación de especialistas en el tema, la forma de hacer negocios exitosos en el mundo globalizado el día de hoy se caracteriza por una necesidad creciente de competitividad dentro de las organizaciones, así como por el constante flujo de bienes ser – vicios y recursos productivos, principalmente productos semielaborados, conocimiento y capital intelectual, este último formado por la suma de capital humano, capital relacional y capital estructural.
Unida a estos factores, la localización juega un papel fundamental para mejorar la competitividad de la organización, de forma que en la evaluación del proceso de selección de una ubicación, la organización ha de contar con la información necesaria para poder generar una matriz de selección adecuada que le ayude a tomar la decisión más acertada que satisfaga sus necesidades, teniendo en cuenta tanto la cultura corporativa como la realidad empresarial de la organización, de acuerdo con la publicado por Lli Torrabadella & Saiz-Álvarez en Determinantes técnicos para la localización de un centro offshore de ingeniería. Una valoración desde la práctica.
El rediseño de las cadenas productivas trastoca la forma del estilo de vida de los habitantes de los países, la forma en la que las empresas llevan a cabo sus procesos y en muchos casos las legislaciones que rigen a tales poblaciones.
La organización del trabajo en las empresas muta desde la tradición industrial taylorista de descomposición del proceso de trabajo hacia una nueva lógica de división cognitiva, basada en la complementariedad de diferentes bloques de saberes homogéneos, que van desde la concepción hasta la fabricación de un producto o servicio. Dos factores estrechamente ligados estructuran a la Nueva División Internacional del Trabajo, acompañados siempre de una exacerbación de desigualdades, de desarrollo, espaciales/ geográficas.
Las políticas de inversión de los países siguen estando orientadas principalmente a la liberalización, promoción y facilitación de las inversiones. “A pesar de que es complicado establecer el grado de causalidad, algunos expertos […] consideran a la Inversión Extranjera Directa (IED) como un catalizador del crecimiento económico, cuyos principales beneficios se dan mediante la transferencia de tecnología, en especial en forma de nuevas variedades de insumos de capital, lo que no se logra con inversiones financieras ni con el comercio de bienes y servicios, y contribuye a una mayor integración del país al comercio internacional. También se ha comprobado que promueve la competencia en el mercado nacional de insumos y es capaz de fomentar la creación de un ambiente empresarial competitivo al incrementar el desarrollo de los negocios.
Asimismo, los países que reciben IED normalmente obtienen capacitación para sus empleados en el desempeño de las nuevas tareas, lo que contribuye al desarrollo del ca – pital humano de esa zona específica. Además, la derrama económica que produce la IED incrementa la recaudación local para los respectivos niveles de gobierno”, según Lascurain Fernández en su apunte Empresas multinacionales y sus efectos en los países menos desarrollados. Economía: teoría y práctica.
El repunte de la exportación y la importación de México luego de la firma de los trata – dos con Canadá y los Estados Unidos ha traído una mayor polarización de la estructura productiva interna, donde grandes empresas son los únicos competidores en los mercados mundiales que poseen tecnología de punta. Por otro lado, existen grandes cantidades de pequeñas, medianas y microempresas que identifican nuestra industria y que son marginadas del beneficio del auge exportador. Mientras tanto, siguen siendo relativamente escasas las medidas orientadas a la inversión en sectores importantes para el desarrollo sostenible.
Las estrategias de subcontratación permiten a las empresas rediseñar sus cadenas productivas Las empresas están obligadas a buscar nuevas formas de producir sus bienes y servicios, buscar nuevos mercados que sean atractivos y sostenibles en el tiempo, para esto el offshoring nace como una herramienta que ayuda a las empresas a descifrar el mapa actual del agitado mundo de los negocios y las condiciones de tratados comerciales con la mayor economía del mundo re – presenta una oportunidad.
Para el economista estadounidense Robert Feenstra, en el proceso de offshoring las actividades pueden realizarse dentro de la em – presa (I+D interna) o adquiridas fuera de la empresa mediante contrato o convenio (I+D externa). Asimismo, la compra de servicios puede ocurrir en el país o en el extranjero, y los proveedores pueden ser empresas de su mismo grupo, empresas de fuera del grupo, organismos públicos, universidades, etcétera. Por tanto, se denominará offshoring a la compra de servicios en el extranjero, sea o no a empresas del grupo.
Cada vez es más frecuente la figura del offshoring como una forma de contratar en otros países servicios necesarios para la actividad productiva doméstica, mejorándose el tiempo de entrega, la capacidad de interacción y, en muchos casos, sin necesidad de realizar una entrega física del bien. La decisión de realizar tareas a través de esta depende de la diferencia entre los precios internos y externos y de la tecnología de las comunicaciones, ya que si esta mejora, los costos de offshoring se reducen.