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Lograr la paridad de género es uno de los principales objetivos de las organizaciones. El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD), tras su estudio Mujeres en las empre­sas 2022 señalan que contar con 30% de mujeres en posiciones de liderazgo puede incrementar hasta un 15% la rentabilidad de las empresas.

Al respecto, Fernanda Prendes, di­rectora de Marketing en Up Sí Vale, des­tacó que la equidad de género es tan importante que debe trabajarse activa y constantemente para alcanzarla, y que al mismo tiempo inspire a las futuras ge­neraciones. Agregó que actualmente, las empresas son más conscientes de la im­portancia de este tema, no obstante, aún falta mucho que trabajar para que estas acciones prevalezcan en el tiempo.

A partir de su experiencia, la es­pecialista señala que es fundamental contratar a más mujeres e integrarlas en puestos de alta dirección. Considera fundamental mantener un equilibrio en el proceso de reclutamiento y selec­ción para una mayor inclusión de can­didatas que puedan desarrollarse en la empresa en puestos de alto nivel.

La presencia de más mujeres en los equipos de trabajo ofrece múltiples ventajas al tener una perspectiva diver­sa, creativa e innovadora que permite alcanzar los objetivos; pero, si además de esto, ocupan puestos de liderazgo, se promueve que todas y cada una de las decisiones que se toman desde la alta dirección y que permean a la empresa, tengan una perspectiva de género, al ser ellas mismas quienes velan por los inte­reses de las colaboradoras y clientas.

Además, es fundamental crear una conciencia sobre el papel que desempe­ñan las mujeres en la fuerza de trabajo, pues son parte imprescindible para al­canzar los objetivos. Para ello es nece­sario reflexionar sobre las tareas que realizan a diario y las desigualdades que deben enfrentar, a fin de crear políticas que disminuyan la brecha de género.

Asegura que otra de las acciones im­portantes es implementar prestaciones con perspectiva de género, a fin de que las trabajadoras puedan tener un equi­librio entre vida personal y trabajo.

Cabe señalar que en el Senado de la República ya se busca otorgar por ley, una licencia de paternidad por 30 días laborables con goce de sueldo a los pa­dres trabajadores, rompiendo así con los estereotipos en el cuidado de los hijos.

Hoy es una realidad que cada vez más mujeres levantan la voz ante in­cidencias que atentan contra su bien­estar, y los líderes de las compañías deben escucharlas por igual, a fin de garantizar su seguridad.

Asimismo, es clave implementar pla­nes de desarrollo que impulsen en te­mas de liderazgo inclusivo, creatividad y negociación.

Esto dará paso a la creación de nue­vos roles, negocios y emprendimientos que catapultan el talento de millones de mujeres alrededor del mundo, al mismo tiempo que las empresas se vuelven di­versas e incluyentes.

Para concluir, una investigación de la firma McKinsey, muestra que los equi­pos ejecutivos con mayor diversidad de género, reportan hasta un 48% mejor desempeño en comparación de los que tienen poca presencia femenina.