La trayectoria empresarial de Luis Miguel Avedaño

EL ORIGEN DEL ESPÍRITU EMPRENDEDOR 

Desde muy joven, Luis Miguel tuvo claro que quería ser su propio jefe. Esta determinación temprana lo llevó a forjar una mentalidad independiente y creativa.

Por mucho tiempo Luis trabajó en la empresa familiar, una carpintería dirigida por  su tío, pero su deseo de tomar decisiones lo llevó a buscar su propio camino. En 2014, a los 27 años, decidió separarse de su tío y comenzar de cero, marcando un momento crucial en su vida. Este periodo fue particularmente desafiante, pero le permitió desarrollar una resiliencia que ha sido fundamental para su éxito posterior.

LA CREACIÓN Y CONSOLIDACIÓN DE RAMAVE

Ramave, una de las empresas más reconocidas en Puebla, no surgió de la noche a la mañana. Luis Miguel y su socio, Cristián Ramos, trabajaron arduamente durante los primeros cinco a siete años, reinvirtiendo todas las ganancias en la empresa. Esta estrategia de reinversión fue crucial para su crecimiento y consolidación en el mercado.

Antes de establecer Ramave, Luis Miguel se dedicaba a la distribución de persianas, trabajando con marcas importantes de Puebla. La colaboración con Cristián Ramos fue un punto de inflexión. Juntos, formaron Ramave, cuyo nombre proviene de la combinación de sus apellidos: Ramos y Avendaño. La sinergia entre ambos socios y su compromiso con la reinversión continua han sido claves para el crecimiento sostenido de la empresa. El compromiso con la calidad y la innovación ha sido una constante en la filosofía de Ramave, permitiéndole destacarse en un mercado competitivo.

DIVERSIFICACIÓN Y NUEVAS OPORTUNIDADES

Con el éxito de Ramave, Luis Miguel ha explorado nuevas oportunidades empresariales. Durante la pandemia, comenzó a invertir en la construcción y venta de casas y departamentos. Este nuevo interés por la construcción se ha convertido en una pasión que complementa su trabajo en Ramave. Desde 2020, no ha dejado de construir, desarrollando proyectos que incluyen casas, departamentos y un salón de eventos en la zona de Lomas de Angelópolis, desarrollado en colaboración con su esposa y sus suegros.

Este salón de eventos, que promete ser uno de los mejores, refleja la visión emprendedora y el compromiso de Luis Miguel con la calidad y la innovación. Además, ha aprovechado las oportunidades surgidas durante la pandemia para diversificar sus inversiones y expandir sus horizontes empresariales.

REFLEXIONES SOBRE EL EMPRENDIMIENTO

Al reflexionar sobre su trayectoria, Luis Miguel destaca la importancia de la perseverancia y la confianza en uno mismo al momento de emprender. Subraya que el apoyo de la familia y la satisfacción personal son más importantes que cualquier logro económico. Para él, su mayor éxito no son sus logros empresariales, sino su papel como padre, esposo e hijo. La salud mental y el equilibrio personal son clave para alcanzar el éxito en los negocios.

Luis Miguel también reflexiona sobre la importancia de creer en uno mismo y de ser resiliente ante los desafíos. Siempre se ha agradecido a sí mismo por haber creído en sus capacidades y por haber luchado por sus sueños. Esta autoafirmación ha sido una fuente constante de motivación y fortaleza en su camino empresarial.

MIRANDO AL FUTURO

Con Ramave firmemente establecida, Luis Miguel mira hacia el futuro con optimismo y determinación. Su enfoque se centra en continuar la expansión y diversificación de sus negocios, explorando nuevas oportunidades y desafíos. Su compromiso con la construcción y el desarrollo inmobiliario sigue siendo una pasión, y planea seguir invirtiendo en este sector. Además, está comprometido a seguir contribuyendo al desarrollo de su comunidad y a mantener un equilibrio saludable entre su vida personal y profesional.

Luis Miguel también se mantiene atento a las tendencias y oportunidades emergentes en el mercado. Su habilidad para adaptarse y encontrar nuevas áreas de crecimiento ha sido una de las claves de su éxito.  

Luis Miguel Avendaño Astorga nos demuestra que el verdadero emprendimiento no solo se mide en logros económicos, sino en la capacidad de adaptarse, innovar y mantenerse fiel a una visión personal. Su trayectoria es un testimonio de cómo la determinación y la resiliencia pueden transformar desafíos en oportunidades, construyendo un legado que va más allá de las cifras y que inspira a nuevas generaciones de emprendedores. Con su enfoque en la calidad, la reinversión y la diversificación, Luis Miguel no solo ha cimentado el éxito de Persianas Ramave, sino que ha abierto caminos hacia un futuro prometedor en diferentes sectores.Su historia es un recordatorio de que el verdadero éxito se forja con pasión, compromiso y una constante búsqueda de la excelencia.